Rodada entre los años 1970 y 1980, investiga las causas y motivos del genocidio desde el nivel de la experiencia: los paisajes de los campos de exterminio y los guetos, las rutinas diarias de los encarcelados, el inexorable trauma de la humillación, el castigo y el exterminio, y los fascinantes y escalofriantes testimonios de aquellos que lo experimentaron de primera mano, salvaguardando para siempre en el tiempo las palabras de aquellos que sobrevivieron. Las imágenes de archivo están desterradas en la obra de Lanzmann y son estas mismas palabras las que ejercen como vehículo y alma de la narración. La obra de un genio, un esfuerzo heróico por humanizar lo inhumano, por narrar lo inarrable y explorar con un detalle sin precedentes los horrores del pasado.