Durante la temporada de recolección de semillas en la aldea de Ban Rabue, Ngern se encarga de recogerlas y almacenarlas para el año siguiente. Desgraciadamente, un grupo de ladrones de cara negra intenta robar las semillas, y Ngern los mata sin querer. Deseoso de evitar problemas, Ngern, junto con sus dos amigos, parte en busca de armas y las trae de vuelta para proteger la aldea.